Fue un papel secundario en una película de terror lo que marcó el inicio de la exitosa carrera cinematográfica de John Travolta, hace 40 años: en el filme “Carrie”, dirigido por Brian De Palma, el joven interpretó al líder de una banda delictiva, recuerda la agencia DPA.
Pero, incluso actuando de chico malo, sus insignias personales ya eran claramente visibles: flequillo negro, ojos azules brillantes y una sonrisa deslumbrante sobre un pronunciado mentón. Travolta, quien mañana celebra sus 60 años, aún conserva su sonrisa encantadora. Lo único que parece haber cambiado a simple vista es el corte de su cabello.
En 1977, al hacer de Tony Manero en “Fiebre del sábado noche”, Travolta se convirtió de un día a otro en superestrella. Millones de adolescentes de todo el mundo se identificaron con la historia del neoyorquino amante del baile. Nacía la era disco.
En el papel que lo lleva a interpretar canciones de los Bee Gees, el actor logró su primera nominación a un premio Oscar, y de pronto, estaba en Hollywood haciendo carrera con grandes éxitos.
En el musical “Grease” (1978), que fue un éxito de taquilla, Travolta, en el papel del rebelde Danny, no sólo sedujo con movimientos de cadera, copete (tupé) y patillas a su rubia coprotagonista Olivia Newton-John. En el filme, hace un importante despliegue de encanto y además brilla como un dotado bailarín.
Pero la década de 1980 lo encontró haciendo papeles más bien malos y cometiendo ciertos errores a la hora de elegir en qué películas participaría. Su carrera parecía empezar a caer en picada, y a nivel privado Travolta también había sufrido un duro revés: su novia, la actriz Diana Hyland, 18 años mayor que él, murió en 1977 de cáncer.
En 1994 se abrió su camino de regreso con una orgía de sangre, asesinato y homicidio. En “Pulp Fiction”, de Quentin Tarantino, Travolta se convirtió en el asesino profesional Vincent Vega, en un papel que le valió su segunda nominación al Oscar.
Un año después, volvió a brillar en la mordaz sátira de Hollywood “Get Shorty” como el gángster Chili, que sueña con el negocio del cine.
Desde entonces Travolta volvió a alzarse como estrella interpretando roles de los más diverso.
Un triste acontecimiento familiar llevó a la familia Travolta a los titulares en 2009. Jett, su hijo de 16 años, murió durante unas vacaciones que la familia pasaba en Bahamas. Desde entonces, se alejó del cine.
Pero recientemente, cambió de idea, y todo parece indicar que regresará nuevamente al éxito con un proyecto junto a Salma Hayek.